Por Minerva Reynosa
Cadáver Perlongher, del poeta potosino Juan Antonio Alfaro (Fondo de Cultura Económica, 2023) fue acreedor al Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino 2022. Festejo su logro y la edición del libro, porque presenta dos cosas que me interesan: las escrituras neobarrocas latinoamericanas y las estrategias de escritura conceptual. Desde el título, Cadáver Perlongher, expone la alegoría de los cadáveres que Perlongher menciona en su paradigmático poema. Al mismo tiempo, exhibe estilos o tradiciones que los poetas neobarrocos zarandearon, evitando el tufo de lo aurático, sublime, armonioso, emotivo. Cadáver Perlongher ¿es un homenaje o contribución? Y a manera de impuesto, atendiendo a la economía lectora, Alfaro nos coloca frente a un corpus literario in situ ¿en construcción o concluso? Nos pone ahí, frente a los cadáveres del poema de Perlongher, pero también frente a otras voces y versos sampleados que interpelan la realidad; a propósito de los cuerpos de los desaparecidos, cuerpos aún o cadáveres. Formando así un texto poema que yuxtapone citas literarias, prosa documental e interpretaciones de imágenes fotográficas. Haciendo la pregunta: ¿en qué se convierten las palabras de esos cuerpos-cadáveres que son versos disidentes que siguen hablando no por la vía justa, sino a través de alusiones que detonan en una protesta lingüística? El libro efectivamente pudiera ser un homenaje, tributo o tal vez ninguno. Digamos que Cadáver Perlongher es una re visitación al poeta argentino Néstor Perlongher, a los poetas con los que reverberaba éste, autores varios de la cultura universal y las subsecuentes promociones de poetas mexicanos, bajo criterios muy específicos de repertorios formales y estrategias textuales; organizados en el texto poema con ingenio, destreza lingüística, intervención política y por supuesto, degradando la idea del prestigio autoral. Hay una dispersión de escrituras como menciona Roberto Echavarren, a propósito de los poetas de Medusario, ya que experimenta al mezclar otros textos, agregando, borrando, repitiendo o enumerando.
Cadáver Perlongher es un libro que participa de las estrategias de las escrituras conceptuales, ya que samplea versos de Cadáveres y otros tantos, donde la alegoría de los cuerpos finitos, desaparecidos, entre un corifeo de voces referenciadas, preguntan: ¿Hay algo que no diga algo? /¿…..? /¿Por dónde tendría que comentar el autor? /¿Cadáveres? / ¿Era polvo el cuerpo? Polvo. Marjorie Perloff en el primer capítulo de Unoriginal Genious, menciona lo que el editor de Eliott consideró de la Tierra Baldía: extensive use of the citation; donde las emociones difícilmente nos alcanzan sin atravesar un zigzag de alusiones. A partir de ese ejemplo y otros, como Pasajes de Benjamin o Cantos de Pound; reflexiona sobre la figura del genio no creador, ese personaje que se aleja del obsoleto modelo del poeta romántico, aislado y torturado por sus pasiones. Kenneth Goldsmith resume a Perloff en Uncreative Writing, mencionando que el genio no creador en la era de la tecnología e internet, es más bien una especie de programador que procesa palabras, diseña, recicla y se apropia de base de datos. Vanessa Place y Robert Fitterman por su parte, en Notas sobre el conceptualismo discuten también las nociones de autoría y originalidad, a partir de las expectativas que genera el uso de técnicas de escritura conceptual como la apropiación, alegoría, flarf, citacionismo, parchescritura, entre otras. Cadáver Perlongher de Juan Antonio Alfaro emplea técnicas de la escritura conceptual que resulta en un texto híbrido, pero que en su acercamiento tiene una lectura tradicional como poema. No hay interés en atender al autor, lo original o lo no original. Como menciona Cristina Rivera Garza en Los muertos indóciles, no se trata de apropiarse sino de desapropiarse. Juan Antonio Alfaro practica el desposeerse del dominio sobre lo propio. Dialoga y argumenta su propuesta textual a través de la poética de Perlongher, otras alusiones puntuales que muestra su gusto distintivo y educación lectora. Siguiendo a Rivera Garza, desapropiarse en tiempos del copy-paste expone las maneras de cómo producir y mover el texto hoy. Así, Cadáver Perlongher no solo tiene estas dos peculiaridades que mencioné anteriormente, sino que también se desvía, duda, como dicta en los versos: El poeta se va del otro lado / Escribir es detritus. Escribir es fragmentarse. Escribir es detritus. Escribir para encontrar el muerto, su cuerpo desaparecido. El zigzag de alusiones de Eliott que dice Perloff, aquí es la re construcción y producción del proyecto textual a través de nichos de muchos significados que detonan con las palabras de cadáver, cuerpo, desaparecidos, escritura, tradición; capas que entre los sustratos hay emociones que se traducen en molestia, hartazgo, protesta. Como dice Juliana Spahr a propósito de lo político, la calle, la realidad, la realidad social que suscita la poesía, aquí se entreteje y elabora al poema. O como se pregunta Rivera Garza sobre las consecuencias de la violencia en México: ¿Qué significa escribir hoy en ese contexto? ¿Cuáles son los diálogos estéticos y éticos que nos avienta el hecho de escribir, literalmente, rodeados de muertos? Cadáver Perlongher extiende la mención hasta hoy de los cadáveres, esos cuerpos desaparecidos, esos desaparecidos que en el proceso escritural emergen: Escribir no es quedarse callado. Hay una cita de Lévi-Strauss que ejemplifica la reconfiguración de la tradición bajo la metáfora del bricolage: lo propio del pensamiento crítico, como del bricolaje en el plano práctico, consiste en elaborar conjuntos estructurados, no directamente con otros conjuntos estructurados (el lenguaje), sino utilizando residuos y restos de acontecimientos, ods and ends, diría en inglés o, en español, sobras y trozos, testimonio fósiles de un individuo en una sociedad. Juan Antonio Alfaro edifica en este libro su protesta, hartazgo y al mismo tiempo, paciencia para que esos ladrillos que mantienen su actividad creativa no nos caigan encima. La poesía como una especie de bricolaje es proyecto que se convierte en refugio.
Minerva Reynosa. Poeta, profesora y gestora cultural. Es autora de más de diez títulos de poesía. Su obra ha sido merecedora al Premio Regional Carmen Alardín 2006 y Premio Nacional de Poesía Clemencia Isaura 2020. Actualmente colabora con Benjamín Moreno en el proyecto de experimentación textual, visual y tecnológico Benerva! Tiene con la poeta y traductora Paula Abramo; y Efraín Velasco, poeta y diseñador, Muiraquiā: Proyecto Fanzinero de Poesía. El cuál se dedica a publicar poesía brasileña al español en México y otras poéticas liminales. Es docente online, consultora de literatura, gestora de distintos proyectos de sensibilización de la poesía y pertenece al Sistema Nacional de Creadores de Arte. IG: @minerva.reynosa
Libros consultados
Claude Lévi-Strauss, El penamiento salvaje, traducción Francisco González Aramburo. México, Fondo de Cultura Económica: 1997.
Cristina Rivera Garza, Los muertos indóciles. Necroescrituras y desapropiación. México, Tusquets Editores: 2014.
Kenneth Goldsmith, Escritura No-Creativa. Consultado en: http://www.forma.forma-color.org/biblio/kenneth-goldsmith-escritura-no-creativa.pdf
Marjorie Perloff, Unoriginal Genius. Consultado en: https://writing.upenn.edu/~taransky/unoriginalgenius.pdf
Vanessa Place & Robert Fitterman, Notas sobre conceptualismo, traducción Cristina Rivera Garza. México, Dirección General de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes: 2012.
Juan Antonio Alfaro. Ha publicado poemas en las revistas literarias Transtierros, Tres Pies al Gato, Des/linde y Low-fi Ardentía. Reseñas y artículos suyos han aparecido en Luvina, Crítica y FILHA. Fue acreedor al Premio Nacional de Literatura Joven Salvador Gallardo Dávalos 2018, en el área de poesía, por el libro (cápsulas, venados); y del Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandido por Cadáver Perlongher.



