Por Francisco J. Serrano
a Juanjo García
Yo soy quien va hacia ti,
no intentes seducirme.
La víctima eres tú, tú eres la peste
en este mundo enfermo
y tu mayor desgracia es mi belleza.
Las leyes de este mundo no pueden detenerme.
Mírame bien, seré lo más hermoso;
lo último que vas a venerar en tu vida.
Ningún dolor te dio tanto placer;
la luna gozará con tu aflicción,
la noche llenará tus vida estéril.
Habito el reino de la oscuridad,
amparo de ladrones y de sueños.
Es aburrida la inmortalidad;
y tú, vano juguete en decadencia,
me darás alegría unos instantes.
Mi juventud crepuscular requiere
fugaces aventuras, me alimento
de vaciar corazones de esperanzas
y estoy acostumbrada a consumar mis deseos.
Irreal e ideal es mi presencia;
recónditos lugares habitas en tus sueños
y ahí me viste por primera vez.
Como una fiebre iré por tu garganta.
Como ante un canto hipnótico te quedarás inmóvil.
Tus venas poco a poco se irán quedando secas
y habitaremos juntos bajo tierra.
Francisco J. Serrano escribió los libros de poesía Bóreas y el sol y Plaza de la luz, publicados por Posdata Editores. Su obra aparece en la antología Sextinas. Pasado y presente de una forma poética, editada por el sello español Hiperión. Es miembro del grupo de improvisación musical y poética Rib Eyes Band. Conserje.
Foto: Helen Alp | Pexels.



